Los perritos bebés, son de lo más adorable del mundo… ¡lo sabemos! su ternura, sus juegos, su tamaño pequeñito, su torpeza nos roban el corazón. Y aunque a todas nos encantaría tener a estos cachorritos desde pequeños, la verdad es que es muy importante conocer cuál es la edad correcta para separar a un cachorro de su madre.
La convivencia de los cachorros con su familia canina es fundamental para un buen desarrollo. Separar tempranamente a un cachorro de su camada y su madre puede tener consecuencias, no solo físicas sino también emocionales porque en estas primeras semanas de vida está la clave para un perro equilibrado. El momento de la separación es muy importante tanto para el perrito como para la mamá por lo cual es un proceso que se debe hacer de manera adecuada y sobre todo en el tiempo correcto. Cómo mínimo, el cachorro debe permanecer con su familia perruna por lo menos sus 2 primeros meses de vida.
¿Qué rol cumple la mamá para el cachorro durante sus primeros meses de vida?
La madre, además de darle leche - alimento esencial para un buen desarrollo durante los primeros meses de vida del cachorro - también son responsables de educarlos y enseñarlos a socializar. Son ellas quienes les enseñan las pautas sociológicas que el perrito necesitará para el resto de su vida y al estar en camada, el cachorro adquiere la conciencia de pertenecer a su especie.
Es fundamental que todos los cachorros, al nacer, tomen el calostro o primera leche que la madre produce tras el parto, porque contiene una gran cantidad de inmunoglobulinas o proteínas defensivas frente a las principales enfermedades infecciosas. Estas proteínas son absorbidas como tales durante las primeras 48 horas de vida del cachorro.
Recibir el alimento materno le da fuerza y cuida sus defensas - es algo que no podrá conseguir en otro tipo de alimento. Si come otra cosa, claro que se va a alimentar pero le hará falta esa parte esencial de su nutrición. Es como en el caso de los bebés humanos, pueden recibir otro alimento pero nunca será igual a la leche materna, quizás necesite tomar algunas vitaminas para percibir una fuente de nutrientes similar.
¿Qué pasa si un cachorro es separado de su camada antes del tiempo recomendado?
Cuando un cachorros es separado antes de tiempo de su madre y su camada, no sólo crecerá más débil - probablemente va a necesitar mayor cantidad de suplementos para equiparar los nutrientes de la leche materna - sino que también será un perro más propenso a enfermarse y también puede que se acostumbre más a la presencia de personas que de otros perros, haciéndolo menos sociable (esto se puede manifestar en miedo o agresividad).
De acuerdo a los estudios y expertos en comportamiento animal, los perros separados de forma prematura de la madre tienen más probabilidad de tener:
- Problemas de posesión con juguetes y comida.
- Miedo a los desconocidos.
- Agresividad con otros perros.
- Poca tolerancia a la frustración.
- Poca inhibición de la mordida.
- Ladrido excesivo.
- Miedo y/o ansiedad durante los paseos.
- Hiperactividad.
- Comportamientos destructivos en casa.
- Ansiedad por separación.
- Inseguridad en la interacción con otros perros.
Los animales que son criados con biberón o que comen el alimento que no corresponde a su etapa de vida (ya sea porque era un recién nacido abandonado o lo separaron tempranamente), cuando son adultos suelen mostrar más preferencia hacia las personas que hacia los mismos de su especie. Esto puede derivar en la incapacidad de mantener una relación normal con otros perros.
Jugar con sus hermanitos de la camada favorece que el cachorro aprenda los hábitos de comportamiento correctos, que le servirán en el futuro para desenvolverse sin problemas entre sus iguales. Es como aprender el idioma correcto para comunicarse de manera fluida cuando sea un adulto y tener las habilidades adecuadas de interacción, entendiendo que hay límites y normas de convivencia.
Además, vale mucho la pena mencionar que los perritos que son comprados en una tienda de mascotas tienden a sufrir lo antes mencionado pero con mayor fuerza. ¿La razón? Además de su temprana separación de la camada, se suma el hecho de que pasan días e incluso semanas en una jaula con poca o nula interacción con otras especies y un ambiente frío y solitario durante la época más importante de su vida.
Conoce los períodos de crecimiento del cachorro:
NEONATAL (de 0 a 2 semanas):
No pueden ver ni oír, solo pueden comer (lactar, porque no tienen dientes) y sentir con sus patitas. Su olfato es el que los guía hacia su madre para alimentarse. La madre es quien los estimula para que puedan hacer sus necesidades y gracias a ella desarrollan las habilidades simples.
DE TRANSICIÓN (de 2 a 4 semanas):
Comienzan a oír y a abrir los ojos. Su gusto y olfato se van volviendo más agudos y dan sus primeros pasitos. Entre la 3era y 4rta semana empiezan a verse sus primeros dientes y ya empiezan a jugar, gemir, ladrar y por ende a comunicarse. Poco a poco van aprendiendo a hacer sus necesidades sin estimulación de su mamá.
SOCIALIZACIÓN (de 4 a 12 semanas)
En esta etapa se establecen los vínculos e interactúan con otros perros y son receptivos con las personas. Entre la 4rta y 6ta semana los dientes completos aparecen.
En la 5ta semana ya tienen más seguridad en sí: exploran, juegan y corren. En la 6ta semana se empiezan a interesar por alimentos sólidos pero aún dependen de la leche materna como principal fuente alimenticia. En la 8ta semana ya pueden hacer una transición completa hacia los alimentos para mascotas porque la madre probablemente ya no los va a querer alimentar.
Entre la 8ta y 10ma semana sucede el aprendizaje de comportamiento, la madre regaña a los cachorros cuando no obedecen y los cachorros se encuentran en un período de desarrollo afectivo y habilidades sociales, observan todo a su alrededor.
¿Cuál es la manera correcta de separar a un cachorro de su madre?
- Como te hemos mencionado, lo más recomendable es que los cachorros estén con su madre durante las primeras 8 semanas de vida. En este periodo reciben la leche materna que les proporcionará todos los nutrientes y proteínas que necesitan para tener un buen sistema inmunológico.
- Al llegar a las 8 semanas de vida, notarás que el cachorro ya está mucho más desarrollado y autónomo, empezará a comer sólidos y la madre no querrá alimentarlo. Por lo que es el momento perfecto para que haga la transición de comida.
- Poco a poco puedes empezar a separar al cachorro por intervalos de tiempo en donde le enseñes a relacionarse con las personas y se pueda acostumbrar a su presencia. Puedes motivar el juego para que aumente su confianza y no se sienta solo. De esta forma el cachorrito será más independiente y no será una separación abrupta que lo pueda perjudicar.
Otras recomendaciones:
- Alimenta bien a la madre de los cachorros. De su alimentación va a depender la salud de sus crías.
- Trata de que el cachorro mantenga el contacto con otros perros sociales (aún cuando no sean de la camada), esto permite un mejor desarrollo emocional y social.
- Estimula al cachorro con juegos y disciplina positiva para que sea emocionalmente seguro y aprenda pautas de convivencia (hacer sus necesidades, caminar con correa, juegos, etc).
Y lo más importante: por el bien de los cachorros EVITA en lo posible separarlos antes de las 8 semanas de vida. El cachorro debe madurar junto a su familia, dale tiempo para crecer a su lado.
