Muchas de ustedes saben que en Pancho’s siempre tenemos las puertas abiertas para todos nuestros clientes (ahora con medidas de seguridad y prevención por la época en la que vivimos). Hace unas semanas tuvimos la visita de una cliente que con mucha curiosidad nos preguntó si podía venir y conocer cómo trabajamos. Con mucho gusto la recibimos y días después, para sorpresa nuestra, nos envió este escrito con su experiencia así que decidimos compartirla con ustedes:
“Desde pequeña me gustan muchos los perros y gatos… Afortunadamente desde muy pequeña crecí en una casa con mascotas y comprendí el valor que tienen y lo mucho que pueden llegar a significar para una persona.
Querer a un perro o gato va mucho más allá de darle cariños y jugar con ellos: la tenencia responsable es muy importante ya que al adoptar una mascota estás adquiriendo un compromiso a largo plazo en donde hay recursos, tiempo, dinero y muchas emociones de por medio. Así que básicamente no es algo que te puedes tomar a la ligera.
Desde hace 8 años tengo 2 perritas rescatadas: Pancha y Canela… y, quienes me conocen, saben mejor que nadie que son mi adoración. Hace poco, justo antes de la cuarentena, se unió Luna a mi familia; inicialmente se iba a quedar por unos días, pero entre todos los perros a los que le he brindado hogar temporal, Luna se robó mi corazón.
Ahora tengo 3 mascotas, todas de tamaño mediano, muy atléticas y juguetonas y sobre todo incondicionales.
Les cuento esto porque, a pesar de que están saludables y llenas de vida, las 3 ya son perras senior puesto que tienen más de 7 años. Así que desde hace algún tiempo empecé a profundizar sobre temas de cuidado animal (incluso mucho antes de la llegada de Luna), más allá de los cuidados básicos que toda mamá perruna o gatuna conoce. Empecé a investigar sobre ejercicios; si debía darles vitaminas o algún suplemento que cuide su cuerpo, averigüé mucho sobre las cosas que debo esperar cuando un perro va envejeciendo y también empecé a buscar información sobre los tipos de dietas para mis gordas (así les digo de cariño): dieta seca, dieta natural, dieta BARF… en fin, me tomé el trabajo de buscar la mayor cantidad de información posible y de conversar con la veterinaria. Todo esto con el fin de brindarles a ellas la mejor calidad de vida durante sus años dorados.
Así que por eso hoy quiero hablarles de mi experiencia con Pancho’s.
Me acuerdo hace unos años, la primera vez que me salió el anuncio de “comida natural para mascotas hecha con amor”. Mi primer pensamiento fue “Wow, comida natural para mascotas… jajaja, literalmente lo hago yo en mi casa (en ese entonces, todas las semanas les hacía un guachito para ponérselo con sus pepitas).” Así que honestamente no consideré comprarles la comida. Sin embargo, decidí seguirlos en sus redes.
Al pasar de las semanas y a medida que veía su contenido, pude enterarme de que Pancho’s había sido creada por unos chefs y que eran tan amante de los animales como yo. Empecé a ver los videos de Bea, donde explicaba qué era Pancho’s Kitchen y por qué era diferente del guachito que yo les hacía en casa… y por primera vez, aún después de haber tenido más de 12 perros a lo largo de mi vida, aprendí sobre el concepto de nutrición animal.
Entendí que el guachito que yo les hacía con mucho cariño, podía haber estado buenísimo, pero quizás no cumplía con los valores nutricionales o el balance de ingrediente que mis gordas necesitaban. Así que tome la decisión de comprar Pancho’s Kitchen por primera vez.
Ese primer pedido me lo entregó Bea personalmente, estoy segura que ella no se acuerda (fue hace mucho tiempo jajaja), y debo confesar que su trato y su personalidad fue tan agradable que hizo aún más grata esa primera compra. En fin, tenía en mi mano los samplers de sus sabores de comida y fui a casa para darles uno a Pancha y Canela… ¡dejaron el plato vacío en cuestión de segundos!
Me dio curiosidad por seguir investigando sobre ellos y entré a su web… pude leer sobre la trayectoria de Simon y Gray y que contaban con expertos en nutrición; inmediatamente supe que no eran recetas improvisadas y que además de tener un sabor increíble, también tenían el porcentaje de ingredientes adecuados. Seguí leyendo y fue muy grato ver que los ingredientes eran de consumo humano y naturales, sin conservantes, ni químicos, ni colorantes.
Para no extenderme mucho en la historia… me convertí en una PanchoLover como dicen ellos y desde entonces alimento Pancha, Canela y Luna con su comida ❤️. Inicialmente les mezclaba la comida seca con Pancho’s, como para que tengan un buen sabor. Pero luego opté por darles en la mañana Pancho’s y en la tarde sus pepitas. ¡Obviamente la comida de la mañana les entusiasma más!
Al pasar de los años, he visto como ha crecido la marca, como han innovado y a la vez cómo han mejorado sus procesos a tal punto que hoy son la única empresa de comida natural para mascotas que está certificada por el MIDA… y eso ya dice muchísimo sobre los estándares con los que se manejan.
Antes de la cuarentena, fui algunas veces a la tienda y me encantaba ver como los perritos llegaban y les daban un snack… era como ver a un niño yendo a una tienda de dulces, muy tierno. Y bueno, luego llegó la pandemia, todos estuvimos en casa por largos meses y ahí valoré muchos aspectos sobre mí y sobre mis mascotas: el estrés, la actividad física, la salud mental y la alimentación. Estos, junto a otros aspectos, son pilares importantes para mantener una buena calidad de vida tanto de nosotros como de nuestros perros o gatos.
También, durante este tiempo, tuve la oportunidad de ver otros emprendimientos de comida para mascotas y empecé a preguntarme cuál era la diferencia, qué me ofrecían unos y otros… Las conclusiones me las guardo para mí.
Cuando empezaron a abrir los bloques, le escribí a Bea y le pregunté si era posible que, cuando abran nuevamente el local, pueda ir a ver cómo era Pancho’s detrás del recibidor y ver cómo era el trabajo y preparación de recetas… Bea me respondió con un gran SÍ.
Llegó el día, tomé todas las precauciones necesarias y fui a su local ubicado en Obarrio. Como siempre, me recibieron de manera muy amable; cumplieron los protocolos de seguridad al tomarme la temperatura, ofrecerme gel alcoholado y mantener la distancia.
Ingresé y empezó mi recorrido: me llevaron de atrás para adelante y me llevé una gran sorpresa al ver que la tienda es realmente grande. Quienes han ido ven parte de la cocina y la tienda en sí, pero para atrás es todo un mundo. Primero me llevaron a la parte donde almacenan los ingredientes y todo estaba muy organizado: la parte de los granos, los vegetales y carnes estaban bien identificados y con control sobre la fecha de caducidad, así como control de temperatura adecuado. Bea me comentó que los proveedores van dos veces a la semana y que, en el caso de los alimentos fríos, afortunadamente la cadena de frío no se pierde en ningún momento, lo que garantiza el buen estado y conservación de los productos.
Cuando le pregunté acerca de quiénes eran los proveedores, me respondió que, al trabajar con productos aptos para consumo humano, trabajan con proveedores como Pollos Melo, Carnes Coclé, Vegetales24 (directo desde Merca Panamá), Tzanetatos, granos chiricanos y pesca fresca del día.
Luego continuamos con el recorrido y fuimos a la parte de la cocina, donde se pican los vegetales, se mezclan los ingredientes y se empiezan a cocinar… tienen 4 ollas enormes que hacen posible la producción del día y a un costado tienen una gran maquina deshidratadora que es la encargada de hacer los treats que tanto les gustan a nuestras mascotas. Una vez hecha cada receta, pasan a la parte del pesaje y empaquetado… este último lo hacen al vacío, lo que garantiza el sabor y la frescura de la comida.
Me dio mucho gusto ver la higiene con la que se maneja la cocina, tanto a nivel de infraestructura como del equipo: todos usan guantes, mascarillas y recogedor de cabello; las paredes están impecables y limpian constantemente el área. Además, Bea me contaba que, así como lo dicen en sus redes y página web, en la creación de las recetas no sólo están involucrados los chefs sino que también cuentan con un zootecnista y experto en nutrición animal que velan por hacer recetas balanceadas, nutritivas y acordes para cada tipo de mascota. Y que constantemente están en la búsqueda y creación de nuevas recetas que sigan cumpliendo los altos estándares y garanticen ese delicioso sabor que tanto le gustan a nuestros gatos y perros.
De hecho, hace poco sacaron productos nuevos… ya los compré para que mis gordas las prueben y han sido todo un éxito porque además de ser buenas y saludables, vienen en formas divertidas para comer como las hamburguesas y alitas de pollo 🍗.
Finalmente llegamos al frente, a la tienda que todos conocemos. Ahí acomodan los productos congelados y snacks en las refrigeradoras y estanterías. Tienen separado y organizado lo que pertenece al Pancho’s Club y lo que es para venta al público en general y hay 3 personas que se encargan de cada canal de ventas: la línea del Pancho’s Club, atención al cliente de la tienda y otra persona que ve los demás puntos de venta (supermercados, petshops, veterinarias, etc).
En total cuentan con un equipo de 16 personas (12 que trabajan en la tienda y 4 motorizados) que día a día hacen lo posible para seguir brindando los mejores productos a nuestras amadas mascotas. Y algo que noté es que hay un buen ambiente de trabajo, y todos tienen en común su amor por los animales.
Esta visita me sirvió mucho para comprender realmente el nivel de compromiso que tienen con las mascotas, con sus productos y por ende con su marca. Esto lo han logrado a través de los años, el trabajo duro y la investigación.
Me siento muy contenta de haberlo podido visitar y de conocer su forma de trabajar. Las invito a escribirles si tienen dudas o a visitar la tienda (con las debidas precauciones) para que puedan conocer más de ellos.”
Mafe Medina
Mamá de Pancha, Canela y Luna y una Pancholover ❤️