Si tienes un gato, seguramente pensarás que estamos locos al decirte que lo abraces, ya que parece una contradicción bastante obvia porque, por regla general, nuestros gati-hijos no son fanáticos de los abrazos.
Aunque no podemos generalizar, es cierto que a la gran mayoría de nuestros amigos gatos no les gusta ser abrazados ni cualquier gesto de cariño que lo pueda hacer sentir "atrapado". Pero, ¿sabías la razón?
¿Por qué a los gatos nos les gustan los abrazos?
Ten presente que muchos comportamientos de tu gati-hijo, aunque sea un animal 100% doméstico y acostumbrado a tu hogar, a veces está basado en sus antepasados. En el caso de los abazos, estos son una forma de restricción para los gatos - aunque ellos son depredadores naturales por excelencia, tambien son presa de muchos otros animales. Entonces, ¿qué es lo primero que hace un depredador cuando atrapa a su presa? ¡Inmobilizarla! Es por esta razón que muchos gatos rechazan los abrazos, ya que se sienten acorralados como si fueran presas; a ellos les gusta sentirse libres y saber que tienen la posibilidad de moverse y escapar.
Si vives en casa con más de un gati-hijo, sabrás que es todo un reto descrifar las preferencias de cada uno: habrán gatos que amen los cariños, otros que los acepten ocasionalmente y otros que prefieren no ser tocados. Entonces es importante ir aprendiendo cuál es la mejor manera de interactuar como cada uno de ellos, en especial físicamente. Y dado que cada gatito es único, descubrir qué le gusta (¡o al menos tolerará!) no significa que pueda ser igual con otro. La conclusión es que acariciar a un gato, en especial a uno que no conoces muy bien puede ser arriesgado, ya que el trato que le gusta a uno puede hacerle sacar las garras a otro.
¿Cuál es la mejor manera de acariciar a un gato?
Como seres humanos, muchas veces asumimos lo que les puede gustar o no a otros animales, en este caso a los gatos, basados en nuestros propios gustos. Si a mi me gustan los abrazos entonces entiendo que a mi gato también y es algo que muchas veces puede estar equivocado. De acuerdo a varios estudios, se indica que los animales prefieren el contacto humano que es similar al de los miembros de su propia especie.
Los amigos felinos a menudo se lamen, una actividad conocida como acicalado social, por lo que es posible que tu gato prefiera que lo lamas en lugar de acariciarlo... el detalle es que no podemos, o no es recomendado que lamas a tu gato. Por lo cual puedes reemplazar esta actividad por un cepillado muy suave y delicado o por acariciar en puntos claves de su cuerpo
Los amigos gatos también tienden a lamerse unos a otros en lugares que tienen glándulas odoríferas, incluso alrededor de los labios, la barbilla y las mejillas; entre los ojos y oídos; y alrededor de la base de la cola. Cuando los gatos se frotan entre sí en estas áreas, intercambian aromas y terminan con un olor similar.
Además, los expertos en gatos recomiendan intercambiar aromas entre dos felinos extraños antes de presentarlos. Esto se puede lograr al limpiar la cabeza de un gato con un trapo limpio y luego acariciar la cabeza del otro gato con el mismo trapo.
Teniendo en cuenta lo anterior, parece lógico que la cara, cabeza y la base de la cola sean los lugares donde los gatos preferirían que sus humanos los acariciaran.
¿Los gatos se dejan acariciar facilmente de desconocidos?
Un grupo de investigadores decició darle respuesta a esta pregunta y realizar un experimento en donde evaluaron 2 aspectos:
- Cómo responden a las caricias de un familiar versus a una persona desconocida
- Qué partes del cuerpo son los mejores lugares para acariciar a un gato.
Para lograr esto, grabaron a 34 gatos de seis meses a un año en sus propios hogares. A los gatitos se les dio tiempo para adaptarse a la presencia del experimentador y la grabadora de video antes de que comenzara el experimento. Cada gato se evaluó en dos días diferentes. En uno de los días, el dueño acariciaba al gato y el otro día, el experimentador lo hacía.
El equipo tocó las tres áreas de glándulas odoríferas: alrededor de los labios, barbilla y mejilla; entre los ojos y las orejas; y alrededor de la base de la cola. Y también cinco áreas adicionales: parte superior de la cabeza, parte posterior del cuello y espalda, centro de la espalda, y pecho y garganta.
Al final del experimento, el equipo de investigación analizó los videos. Primero, buscaron la cantidad de veces que los gatos respondieron de forma positiva con parpadeos lentos, lamieron a la persona o frotaron su cabeza contra ella, se acicalaron, amasaron y levantaron la cola.
Después, los investigadores contaron la cantidad de veces que los gatos mostraron un comportamiento negativo, incluyendo agitar o mover la cola, alejar la cabeza de la persona, lamerse los labios, morder o golpear a la persona con su pata.
Los resultados del experimento demostraron que los gatos mostraban comportamientos más negativos cuando se les acariciaba cerca de la cola. De forma interesante, también parecían preferir las caricias del experimentador que las de su dueño. Los investigadores ofrecieron algunas teorías para explicar este sorprendente resultado:
- Los experimentadores eran nuevos y novedosos y, por lo tanto, más interesantes para los gatos.
- La caricia de dos dedos de los dueños no era lo que los gatos estaban acostumbrados o esperaban.
- Los gatos estaban acostumbrados a iniciar interacciones con sus dueños y no al contrario.
- Algunos de los gatos podrían haber desconfiado de sus dueños por razones desconocidas.
4 lugares clave para acariciar a un gato
Después de tantos estudios, teorías e investigaciones, se ha llegado a la conclusión de que, en la mayoría de los casos, los gatos tienen lugares del cuerpo en común donde les gusta recibir caricias:
- Base de la barbilla: Los gatos parecen disfrutar mucho de las caricias suaves debajo de la barbilla, en especial en el lugar donde la mandíbula se conecta con el cráneo, ya que contiene muchas glándulas odoríferas.
- Mejillas, detrás de los bigotes: Parece que a los gati-hijos les gusta mucho cuando frotas áreas de su cuerpo que contienen glándulas odoríferas, porque esas pequeñas glándulas liberan su olor sobre ti. ¡Te "marcaron con su olor" sin siquiera intentarlo!
- Base de las orejas: ¿Adivina qué hay en la base de las orejas de tu gato? Así es, más glándulas odoríferas. Al parecer, el objetivo de las marcas de olor es hacer que el territorio de tu gatito (incluyéndote) huela familiar, y por tanto cómodo y seguro. Es por eso que los cabezazos o pequeños golpes son el pasatiempo felino favorito.
- Base de la cola: Muchos gatos parecen disfrutar cuando su humano pasa su mano por su espalda y aplica una presión suave en la base de la cola. Si tu gatito aumenta su ronroneo y levanta su trasero hacia tu mano, significa que le gustan esas caricias.
Evita acariciar a tu gato en este lugar
Podemos decir que a la mayoría de gati-hijos, no a todos pero sí a la mayoría, no les gustan las caricias en el estómago o vientre. Esto se debe a que, si tu gatito viviera en la naturaleza, los depredadores serían una amenaza constante. El punto más vulnerable de su cuerpo es su vientre. Justo debajo de la superficie de esa piel sedosa yacen todos sus órganos vitales.
Otra razón podría ser que los folículos pilosos en el área del vientre y la cola de un gato son hipersensibles al tacto, por lo que acariciarlos puede ser demasiado estimulante. En cualquier caso, la mayoría de los gatos se protegen de forma instintiva la barriga, aunque algunos aprenden a disfrutar de un suave masaje. Tu mejor opción es asumir que tu gato no lo hace y limitar tus caricias a áreas seguras de su cuerpo.
Cuéntanos, ¿tu gato se deja acariciar? ¿Cuál es su área favorita? ¿Se deja abrazar? Déjanos tu respuesta en los comentarios.