Los bigotes de las mascotas, a diferencia del vello facial en los humanos, tienen un papel muy importante para ellos y por esa razón no es buena idea cortarlos y peor aún arrancarlos.
Por si no lo sabías, a los bigotes también se les conoce como vibrisas, pelos táctiles o pelos sinusales y son órganos sensoriales que transmiten información de manera constante al cerebro de las mascotas. En el caso de las personas, nosotros podemos decidir no tener vello, aunque este, sin importar dónde crece, existe por una razón. En el caso de las mascotas, el pelaje y los bigotes tienen su razón de ser y cumplen funciones súper importantes para su supervivencia.
Normalmente el hocico de un gati-hijo tiene entre 8 y 12 bigotes, pero también existen otros pelos modificados del mismo tipo y con la misma función por encima de los ojos, en la barbilla y en la parte trasera de la parte más baja de sus patitas delanteras.
Cada bigote crece en su propio folículo piloso y esos folículos se implantan de una manera más profunda que los ordinarios y están rodeados de nervios, células sensitivas y músculos. Sin los bigotes, este órgano sensorial no es funcional.
Gracias a estos bigotes, los gatos y también los perros, ni siquiera tienen que tocar algo para saber dónde está ya que con las vibrisas tienen una especie de dispositivo de alerta o radar que ayuda a ubicar las cosas en un espacio físico, evitando choques y aproximaciones demasiado cercanas a la cara y ojos de la mascota. Además les ayuda a percibir el tamaño y la ubicación de los obstáculos.
Como los gati-hijos no ven muy bien de cerca, los bigotes les ayudan a conocer mejor su alrededor. Gracias a su textura larga, gruesa y flexible ayudan a que los gatos puedan calcular las distancias cuando saltan y a desplazarse por lugares pequeños o caminar en línea recta.
¡Cortar los bigotes equivale a una amputación temporal!
Aunque suene increíble y exagerado, una de las razones para no cortar los bigotes de un gato es que, al ser un órgano sensorial, si es cortado este se inhabilita y ocasiona un daño físico temporal en el gato. Es importante mencionar que de hacerlo, no ocasionará dolor a tu gati-hijo pero definitivamente lo dejará desorientado e inseguro.
¿Has escuchado sobre la fatiga de bigotes?
Probablemente no has escuchado este término, y la verdad no te culpamos, no es muy común ya que no es algo comprobado. Sin embargo, hay estudios que proponen que los gatos pueden llegar a tener “fatiga de bigotes”. Seguramente te preguntarás qué es eso… y bueno, te ponemos un ejemplo muy claro: si el plato de comida o agua es pequeño, los bigotes de tu gati-hijo probablemente se rocen con las paredes de los platos ocasionándole “fastidio” y llevándolo a hacer cosas como sacar la comida del plato, negarse a comer, comer con incomodidad o volver un desastre su área de comida.
El concepto de “fatiga de bigotes” se refiere a la fatiga por sobreestimulación y que puede ocasionar estrés en tu gati-hijo, llevándolo a hacer cosas como las mencionadas arriba.
- ¿Cómo reconocer si a tu gati-hijo le molesta su plato de alimento o agua?
Mencionando los comportamientos comunes que muestra un gato cuando siente fastidio en sus bigotes, puedes poner atención a la manera en que come tu gati-hijo: si puede meter bien su cara dentro del plato, no hay problema. Pero si el plato es estrecho podrás notas cosas como que tu gati-hijo se pasea frente a la comida sin ir a ella enseguida aunque tenga hambre o si saca su comida del plato para comerla en el suelo. Algunos gati-hijos incluso optan por lamer los bordes del plato justamente para evitar el roce con sus bigotes al meter la cara.
Si notas alguno de estos comportamientos, te recomendamos hacer la prueba cambiando de plato. Si el comportamiento continúa a pesar del cambio, es recomendable llevar a tu gati-hijo al veterinario para descartar un problema más profundo o de otra índole.
¿Qué pasa si corto los bigotes de mi gato?
Como te mencionamos arriba, los bigotes de los gatos tienen una razón importante de ser. Si tu gati-hijo llega a perderlos por un accidente o se deben cortar por motivos de fuerza mayor (por estética o entretenimiento jamás será una razón válida), perderá su sentido de orientación y equilibrio. Podría lastimarse o caer mal si salta o corre porque no podrá calcular bien los espacios y distancias, así como quedarse atrapado en un lugar demasiado estrecho que no pudo calcular bien.
Además, como todo pelo, estos se caen y es un proceso totalmente normal. El problema viene cuando se remueven o cortan todos a la vez. Afortunadamente los bigotes vuelven a crecer y recuperarán su tamaño en uno o dos meses si su bulbo piloso no ha sido dañado.
Los bigotes como un indicador del estado emocional
La posición de los bigotes de nuestro gati-hijo puede ser un indicador de su estado de ánimo. Si están relajados significa que tu gato está en calma; si están erizados hacia adelante significa que está alerta y si están “aplastados” o hacia atrás significa que pueden estar enfadados o asustados.
Claro está que a todo esto se le debe sumar su lenguaje corporal en general, como la posición de las orejas, lomo y su cola para poder tener una idea más clara de cómo se encuentra anímicamente nuestro gati-hijo.
¿Tu gati-hijo ha perdido alguna vez todos sus bigotes? Cuéntanos qué le sucedió y si le afectó perderlos. Nos encanta escucharte y que entre nuestras lectoras se compartan sus experiencias.