Llega el fin de semana o tienes un par de días libres y nada mejor que organizar un paseo al interior del país. Peeero, muchas veces nos detenemos de hacer nuestros planes por nuestros perri-hijos. Entre las preocupaciones principales están:
- Encontrar hospedajes y sitios pet friendly
- Saber si nuestro perri-hijo podrá aguantar bien todo el viaje.
Antes era más complicado porque debíamos buscar un hospedaje o persona de confianza que cuide a nuestras mascotas e indudablemente una siempre se quedaba con la preocupación de si lo estarán cuidando bien, si estará deprimido, si no lo tendrán enjaulado, etc., etc. Pero, afortunadamente, la cultura pet friendly ha ido creciendo en los últimos años en Panamá y hoy es más común encontrar hoteles, restaurantes y espacios donde las mascotas son bienvenidas; por lo cuál ya no hay razón para dejarlos por fuera de nuestras vacaciones y paseos.
Sin embargo, la forma en que tu perri-hijo tome el viaje en auto es otro tema diferente ya que muchos se acostumbran enseguida mientras que a otros les cuesta un poco subirle al carro. Pero no te preocupes, Pancho's Kitchen te trae unos super consejos para sacarle el máximo provecho al paseo familiar.
8 consejos para viajar en auto con tu perro
Es de vital importancia considerar el temperamento de tu perri-hijo para decidir si es buena idea que te acompañe en el viaje. Debes prestar más atención a su temperamento que a su raza, ya que cada perro tiene distintos niveles de tolerancia a los escenarios y sonidos a los que se expondrá durante unas vacaciones; esa diferencia está presente incluso entre perros que pertenecen a la misma raza. El objetivo de salir de vacaciones es relajarse y descansar. Si tu perri-hijo está nervioso y te contagia ese estado de ánimo, es posible que no esté a gusto durante el viaje, por lo que debes averiguar cómo mejorar las condiciones para que todos lo disfruten.
De igual manera, es necesario considerar el tamaño pues algunos hoteles cuentan con restricciones al respecto y un número limitado de mascotas que pueden admitir por habitación.
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Prepara a tu perri-hijo para que adore los viajes en auto: Notarás que hay algunos perros que tienen mayor facilidad para adaptarse a los paseos en auto que otros. Por eso es importante que antes de organizar un gran viaje empieces a hacer paseos cortos con él para ver si se marea o pone ansioso. Para ambos casos hay que ver el grado de malestar que le puede ocasionar ya que si es leve, puedes apoyarte en los consejos de tu veterinario de confianza para mejorar su experiencia con el auto en movimiento.
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Evita alimentarlo antes de los viajes: ya sean paseos cortos o largos, lo mejor es evitar de darle de comer a tu mascota momentos antes de iniciar el viaje. Con esto evitas mareos y posibles accidentes de vómito. Si el viaje es largo, es importante que cada tanto le des agua y quizás unos bocados de comida para que no esté largas horas sin haberse alimentado.
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Dale prioridad a la seguridad. Es muy poco probable que te plantees conducir sin ponerte el cinturón de seguridad, así que dejar a tu perro desatado tampoco es una buena opción. Cuando el auto esté en movimiento, se recomienda elegir una jaula que tenga las características adecuadas para tu perro, es decir, el tamaño debe permitirle sentirse cómodo sin que sobre espacio (lo que representa un riesgo en caso de accidente). Puedes colocar la jaula en la parte trasera (como en una camioneta) o en el asiento trasero según el tamaño de tu perro y de tu vehículo. Otra opción es utilizar un arnés de seguridad para detener a tu mascota dentro del auto.
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Planifica el tiempo de viaje considerando las paradas técnicas. Viajar con un perri-hijo se asemeja mucho a viajar con un niño pequeño, ya que tendrás que tomar en cuenta el tiempo adicional que necesitarás para hacer muchas paradas en el camino. Tu perro tendrá la necesidad de ir al baño y también es necesario que le permitas estirar sus patas después de unas cuantas horas de viaje. Procura tener a la mano lo necesario para limpiar, además de su correa, arnés, su tazón de comida, su tazón de agua y agua fresca para beber.
Si tienes pensado detenerte a comer en el camino, elige un lugar al que tu mascota pueda acompañarte, ya que no es buena idea dejar a ningún animal en el auto sin supervisión.
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Haz el equipaje de tu mascota. Siempre que viajes con tu compañero fiel, lo ideal es que lleves contigo los artículos de primera necesidad como bolsas para excremento y tazones de comida; sin embargo, no olvides todo aquello que le permita a tu perri-hijo sentirse como en casa y esto incluye sus juguetes, cobijas y cama, si el tamaño no lo impide.
Asimismo, debes asegurarte de que el collar de tu perro tenga una placa de identificación y que lo use en todo momento; tampoco olvides empacar un botiquín de primeros auxilios para mascotas en caso de que se presente alguna emergencia. También puede ser de gran ayuda que lleves una foto reciente de tu mascota si llegan a separarse en algún momento.
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Espera lo inesperado. Es posible que debas reconsiderar tus expectativas si crees que tu viaje por carretera estará libre de contratiempos. Llevar a tu perro de vacaciones puede crear momentos maravillosos que sean dignos de recordar, además de que les daría tiempo adicional para fortalecer su vínculo puesto que los perri-hijos siempre están listos para la aventura.
A pesar de ello, es posible que un viaje de esta especie les genere estrés a ambos, sobre todo si las cosas no salen de acuerdo al plan. Considera que tendrás que ser flexible respecto a tus planes y mantenerte atento a las necesidades de tu perro, incluso si eso implica que debas omitir un par de actividades.
- Coloca un cobertor de asientos: Tanto para evitar la cantidad de pelitos que tu perri-hijo pueda botar así como accidentes en los asientos en caso de que llegue a vomita. Un cobertor es la manera más práctica y segura de que tu perro viaje cómodo y tu auto no sufra daños mayores en caso de algún accidente.
- Diviértete al máximo: Ahora que ya tienes tu check list de consejos que no te puedes perder al momento de viajar, no puedes dejar por fuera la diversión y los momentos inolvidables que puedes vivir junto a tu perri-hijo. Fotos, paseos, paisajes y tantas cosas más que pueden compartir y guardar el recuerdo para siempre.
¿Has viajado con tu perri-hijo? ¿Cómo ha sido tu experiencia y qué consejos puedes compartir a nuestros lectores al momento de viajar? ¡Déjanos tus comentarios!